Las mujeres son guerreras, y llevan décadas demostrando sus capacidades y conocimientos para desarrollarse en cualquier ámbito con el mismo éxito que sus compañeros hombres.
Según los últimos datos de la
Encuesta de Población Activa, en el cuarto trimestre de 2023
el 47,6% de las personas ocupadas en España eran mujeres. Concretamente, 11.453.000, cifra que
aumentó un 3,1% con respecto al mismo periodo del año anterior.
Sin embargo, como apuntan desde la multinacional
Synergie, especializada en soluciones de recursos humanos y servicios de empleo, “todavía queda un largo camino por recorrer en lo que a igualdad se refiere”. Según el último estudio del
Sindicato de Técnicos del Ministerio de Hacienda,
la brecha salarial en España ha superado los 5.000 euros de diferencia en la retribución anual entre hombres y mujeres.
Las diferencias en cuanto a empleabilidad entre hombres y mujeres también se hacen palpables en el momento de
solicitar un puesto de trabajo. Según un estudio de
LinkedIn, mientras los hombres aplican si cumplen un 60% de los requisitos especificados, las mujeres tienden a hacerlo solo si están convencidas de
cumplir con la totalidad de los criterios detallados.
Además, un 64,5% de personas inactivas desanimadas, que no buscan trabajo porque creen que no lo encontrarán, son mujeres, 89.000.
¿Qué ocurre con los puestos de responsabilidad?
Según los últimos datos del
Instituto Nacional de Estadística de finales de 2023, hay un
37% de mujeres en consejos de administración de empresas del sector privado. Esto supone un aumento de casi el 4% con respecto al año 20222. Sin embargo, el porcentaje de profesionales que
presiden estas compañías no es superior al 11%.
¿Cuáles son los sectores con más mujeres?
La última edición del Informe del Mercado de Trabajo de las Mujeres, publicado por el Ministerio de Trabajo, especifica que el mayor número de mujeres empleadas se encuentra en las actividades comerciales al por menor, los servicios sanitarios, educativos y de comidas y bebidas.
También pone en valor cómo la representación femenina ha aumentado en los ámbitos de servicios sociales sin alojamiento (+8,81%), actividades administrativas (+8,6%) y los servicios de asistencia en establecimientos residenciales (+6,36%).